La demolición de viviendas construidas entre los treinta y los cuarenta en la ciudad de Ankara (Turquía) con motivo de la expansión de la ciudad (y la consiguiente especulación urbanística) de esos años, desencadenó un fenómeno curioso (explicado en la sección Eco-Tech del magazine Architectural Design de Diciembre de 1972). Un mercado de productos de construcción derivados de dicho proceso, totalmente seleccionados de hasta 40 tiendas diferentes que vendían objetos como: ventanas, puertas, vigas, bloques… totalmente diferenciados por calidades, tamaños y prestaciones para que pudieran reutilizarse en la construcción de las futuras viviendas. Configura un panorama abierto de construcción a través de componentes reutilizados que vuelve a tener gran vigor y sentido en la actualidad.
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