El telefonillo de Bloxham (millonario) decía que no era posible en francés, mientras el de Lovag seguía en silencio... pero cuando todo parecía perdido... Sofía, la chica que hace la comida para Lovag nos abrío la puerta y nos montamos en su renault directos a su casa...
En un mismo (extenso) terreno y sólo separadas por unas cuerdas se encuentran la super (mega) casa del millonario inglés obra de Lovag y la propia casa del arquitecto (finés, ruso? cada uno dice una cosa)... en la que fuimos muy bien recibidos por... Lovag, de 85 años, que intentaba comunicarse con nosotros en perfecto francés cuando nosotros sólo hablábamos un imperfecto castellano... Llamó al millonario diciendo que éramos periodistas españoles y éste le pidió pasta por fotografiar su casa así que pasamos y nos quedamos en la de Lovag... que nos enseño algún aparato de su casa como una mesa circular que aparece o desaparece en una de las estancias o su cocina extensible... invitándonos a recorrer toda su finca...
...llena de pequeños talleres, hojas escritas sobre su teoría de la habitología y miles de pruebas de hormigón proyectado, caperuzas, capotas... tubos, chapas...
...cápsulas de prueba o de exposiciones de GRP abandonadas...
...viviendas extraterrestres... casas provenientes seguramente de otros planetas y que parecían demostrar la atípica relación de Lovag con seres de otro planeta...
...muchas maquetas 1/1 que representaban muchos años de trabajo, de ensayo y error del propio Lovag (un cruzado de la arquitectura sin duda alguna e idealista de los que escasean)... mucho más interesante que la obra maestra millonaria, más auténtica...
... que las miles de burbujas que vimos desde el coche con miedo a ser disparados por alguno de los francotiradores que Bloxham (el millonario) tenía apostados en las ventanas circulares que se abren y cierran con un elemento neumático....
Nuestra segunda parada era el plateau de Calern... observatorio astronómico del gobierno francés en una de las cimas más elevadas de la costa azul...
...por algunos conocida como la casa de Barbapapa... el lugar parece una especie de estación del proyecto Dharma... antaño convulsa y ocupada pero ahora deshabitada...
... y encima del desierto... más signos de una antígua civillización más civilizada que la nuestra... que habitaba en burbujas desgastadas que hacían que todoo pareciera Tatooine...
... con sus rayos laser interestelares y sus hansolos y su wookies... (parecía que Chewbacca o John Locke fueran ha aparecer por allí en cualquier momento...)
...unas vías de ferrocarril parecía un obsoleto sistema de conducción de los cañones, que a su vez parecían ánfooras y que realmente creo que pude leer en algún sitio que son una especie de telescopios que hace años eran de alta tecnología...
...husmeamos bastante esperando que aparecieran los "OTROS" pero no había nadie a pesar de que el inetrior estaba lleno de impresoras de esas que gastan un montón de cartuchos, mapas de lugares desconocidos, sillas y una ampliación del edificio muy poco afortunada y de la que Lovag nos había advertido: Calern ya no existe!!!
...Nuestra última parada fue la denominada "Ballena" de Pascal Haüsermann...
...situada en un lugar llamado St.Georges de un pueblo Sta.Marie du Mont en la zona de Rhone Alpes de un país denominado como Francia...
...dicen que fue un antíguo restaurante con piscina marciano a algo así... al borde de la montaña... aunque ahora s´lo parece el trastero de los dueños de la casa de al lado, de estilo montañes, con jardín no delimitado y lavadora en el exterior que me recordaba un poco a esa americanas cuyo dueño es aficionado al bricolage, por loo que siempre parecen en construccióon...
...imaginé por un momento el lugar lleno de bañistas apelotonados en la pequeña piscina sujeta por una decena de pilares de hormigón entrelazados... todos llevaban escafandras o mutacioones en su cuerpo o piezas robóticas en su interior que contrastaban con el intenso verde y azul de la vegetación y el cielo respectivamente...
1 comentario:
Un viaje fantástico, gracias por compartirlo
Publicar un comentario