LIBERTAD Y TRANSGRESION CATALOGUIZADAS

La elección de una serie de prendas de vestir se nos aparece cómo un acto deliberadamente libre en nuestra capitalizada sociedad. Buscamos con ello una adquisición de identidad propia que hace sentirnos bien dentro de unos parámetros de asociación [ya sean tendencias, modas, grupos sociales...]. Somos conscientes de las connotaciones, los significados que se ocultan detrás de ciertas prendas y las usamos para des/revalorizarlos según nuestros propios intereses. Si a esto le unimos una pérdida contexto de prendas, de objetos de uso específicos (hablamos de zapatillas de boxeo para salir de noche, de cinturones que nada recogen, de gafas de ski en la plaza Mayor...), nos convertimos no sólo en seres libres sino transgresores, lo cual nos aporta una sensación de satisfacción en nuestra sociedad diferenciadora.
Si nos remitimos a las formas de adquisición de la ropa, de esas prendas que nos hacen ser diferentes, importantes e irrepetibles, nos damos cuenta de la facilidad que supone crear un ejército de seres diferentes debido al poder que tiene el sistema capitalista de venta de productos: el infalible y adorado CATALOGO.
Si tomamos dos tipos de zapatos, dos de pantalones, dos de camisas y dos de chaquetas podremos vestir a 16 personas de formas diferentes. Si cada tienda representa una gama mucho mayor que la citada, si tenemos la gran libertad de combinar las prendas de los
distintos suministradores... obtenemos cómo resultado una sociedad que viste cómo quiere... que es cómo quiere ser... y encima lo demuestra a partir de la imagen visual, que en nuestro sistema es el método aprehendido para la captación de conocimiento (todo esto cambiaría si fuésemos perros o mariposas)

Necesitaríamos 80 tipos de zapatos. 80 de pantalones, 80 de camisas, 80 de chaquetas (todos unisex, eso sí) para vestir a una población cómo la española

(80e4_80x80x80x80=40 millones de personas vestidas de forma diferente)... si existe una diversidad mayor es sólo para que no nos demos cuenta de ello...

Disfrutemos de una LIBERTAD y TRANSGRESION CATALOGUIZADAS